Ciudad de México ¿porque se inunda?
Independientemente de la época del año, cada vez que llueve en la Ciudad de México (CDMX), se vive un nuevo pánico en las calles pues hay zonas donde los autos se sumergen rutinariamente como improvisados submarinos. Pero, ¿Por qué la Ciudad de México siempre se inunda? Si ya lo sabes porque no lo arreglan? ¿hay un remedio?
La CDMX se asienta sobre cinco lagos -Texcoco, Zumpango, Xaltocan, Xochimilco y Chalco- en una cuenca que a su vez está rodeada de montañas. Y fue por estas cualidades que los aztecas decidieron fundar la Gran Tenochtitlan hace casi setecientos años. Pero aparte del registro histórico y la angustia, trae arrepentimientos de todos los tamaños.
Causas de las inundaciones
El gobierno mexicano paga alrededor de 430 pesos por cada tonelada de residuos aceptados a los vertederos de Edomex y Morelos.
Más de 20 millones de personas viven, trabajan o visitan la Ciudad de México. El problema de las actividades productivas en las ciudades es un gran desafío. Es la segunda metrópolis más grande en producción de desechos en el mundo, generando cerca de 13,000 toneladas de desechos por día.
El aumento de la población, el aumento del consumo de productos en la vida de los capitalinos, así como la falta de comprensión y acción para solucionar el problema de la generación de residuos ha llevado a que el problema no disminuya, sino que empeorando.
En esta época del año comienzan las lluvias y las inundaciones asociadas en la CDMX y se supone que los diques deben contener y recolectar agua de lluvia para evitar estos problemas, sin embargo, algunas de estas embarcaciones reglamentarias se han convertido en desguaces.
La basura ha sido una de las principales causas de inundaciones en la CDMX, y el Sistema de Agua de la Ciudad de México (Sacmex) afirma que la basura es responsable del 80 por ciento de los charcos e inundaciones.
El sistema de recolección de basura de la ciudad es inadecuado para hacer frente a las más de 13.000 toneladas de residuos sólidos que se generan cada día, por lo que la capital del país está al borde del colapso ambiental, según expertos.
No es culpa de Tlaloc, sino de alguien que no hace desagües.
En 2016, era urgente reemplazar al menos el 30% de la red hidroeléctrica del CDMS. El entonces titular del sistema de abastecimiento de agua de la Ciudad de México pidió reemplazar cuatro mil kilómetros de tuberías con más de dos siglos de antigüedad, algunas de las cuales fueron aprobadas por Porfirio Díaz. Así, además de la insuficiente capacidad de drenaje, se produce una sobre explotación del acuífero que abastece de agua potable a la población, paradoja en la que la ciudad permanece seca por dentro y su superficie se inunda cuando llueve.
El oponente más débil.
No conforme con el desastre líquido de la CDMX, hay otro factor muy importante que empeora cada vez más las inundaciones: la basura. Hasta principios de este año, la mitad de las grandes inundaciones se debían a desagües obstruidos con gran cantidad de escombros, según la ex Asamblea Legislativa del Distrito Federal.
El pasado jueves 30 de agosto, la ciudad estuvo cerrada durante casi cinco horas debido a las fuertes lluvias que provocaron inundaciones en toda la CDMX. ¿Se podrían haber evitado? Según el actual jefe de gobierno, José Ramón Amiev, sí.
¿Cómo lo sabes? Durante la inspección a la planta de compactación de residuos urbanos de Istapalapa-2, Amieva explicó que diariamente se generan 13.000 toneladas de residuos, de los cuales el 13% cae a las calles, es decir unas 1.690 toneladas.
¿Habrá alguna vez una inundación?
Desde 1629, los historiadores han reportado los grandes tornados que sepultaron la Ciudad de México como la chilanga de la Atlántida, donde perecieron miles de personas y animales. Las características geográficas de esta metrópolis y la estupidez de ser numerosos e inconscientes tienen un solo resultado: no pudimos ni podremos hacer frente a las inundaciones a gran escala.
Esto no es pesimismo, esto es: corrupción y asentamientos ilegales en lugares estratégicos donde hay exceso de agua, como ríos, lagos, quebradas y bosques. Es basura adicional. Esto es repoblación..
Desafía al destino.
Por suerte, la lluvia no parará. Desafortunadamente, seguirán causando estragos. Así que además de armarte de botas, paraguas e incluso flotadores, quizás te convenga armarte de coraje para no tirar basura en las calles, y paciencia para soportar el caos que el cielo delata gota a gota.